Bob Avakian responde a los argumentos —las mentiras y tergiversaciones— que tratan de “justificar” la matanza genocida de los palestinos perpetrada por Israel con apoyo total de Estados Unidos.

El texto a continuación es la traducción de la transcripción de la publicación “Número Seis” de Bob Avakian en sus redes sociales oficiales. La traducción al español es de revcom.us y la versión que acá se publica incluye algunas ligeras ediciones responsabilidad de comrev.co.

Siga a Bob Avakian en Substack, Instagram, Facebook, X, Telegram, Threads, TikTok, WhatsApp y YouTube.

Les habla Bob Avakian (BA) de nuevo, directo y sin rodeos con la verdad sobre lo que está pasando en Palestina y en respuesta a los argumentos —las mentiras y tergiversaciones— que tratan de “justificar” la matanza genocida de los palestinos perpetrada por Israel con apoyo total de Estados Unidos.

Una y otra vez, oímos a los portavoces mediáticos de este sistema (y otros) justificar las acciones genocidas de Israel señalando el ataque contra Israel de parte de la fuerza armada palestina Hamas el 7 de octubre de 2023, cuando Hamas mató a grandes números de civiles israelíes, incluidos niños, y cometió otras atrocidades y tomó de rehén a cientos de israelíes.

Pero los acontecimientos cruciales no se iniciaron el 7 de octubre de 2023. Al establecer el Estado de Israel en 1948, las fuerzas israelíes destruyeron sistemáticamente cientos de aldeas palestinas, asesinando a miles de palestinos, violando a muchísimas mujeres, expulsando a cientos de miles de sus hogares. Y desde entonces, Israel repetidamente ha ejercido una asesina opresión contra el pueblo Palestino, con repetidas masacres que involucran los actos más depravados. Así que, si bien Hamas no es una fuerza para la liberación, y sus acciones el 7 de octubre sí incluyeron crímenes de guerra, de ninguna manera esto alcanza la misma escala de lo que Israel le ha hecho al pueblo Palestino durante generaciones, antes del 7 de octubre — y para nada se compara con la masacre genocida de los palestinos que Israel está cometiendo ahora.

Como he señalado anteriormente, respecto a los horrores a los que Hitler y los nazis sometieron a los judíos, y la manera en que la situación actual es muy diferente:
Ya no son los años treinta ni la Segunda Guerra Mundial, cuando los nazis infligieron atrocidades horrorosas y genocidio en masa contra el pueblo judío. No se trata de una situación en que los palestinos acorralen a judíos indefensos en campos de concentración y los sometan al genocidio. La situación actual es lo opuesto.

Israel es una potencia militar con armas nucleares, fuertemente avalada y abastecida por la potencia imperialista dominante en el mundo: Estados Unidos; y en su relación con el pueblo palestino, Israel es la nación dominante que durante generaciones ha impuesto una opresión tipo apartheid sobre los palestinos. 

(Eso es de mi declaración, Algunas verdades básicas sobre Israel y Palestina, que se encuentra en revcom.us)

Otro pretexto que propagan Israel y sus seguidores para “justificar” la matanza en masa de los palestinos es que: “Hamás está escondiéndose en la población palestina en Gaza, así que Israel no tiene otra opción salvo matar a civiles en su persecución a Hamás”.

Otra vez, pura paja. El hecho es que Israel está atacando a Gaza con bombas masivas de 1 tonelada que sin duda van a matar a enormes cantidades de civiles, no solamente a los combatientes de Hamás. Más de 2 millones de palestinos están apiñados en el muy pequeño territorio de Gaza, confinados ahí bajo el control israelí, así que ¿acaso es sorprendente que Hamas “se mezcle” con la población palestina más amplia? Qué hipocresía más repugnante el que Israel se queje de que Hamás esté mezclado entre la población general de Gaza y que lo use como excusa para masacrar a civiles palestinos.

“Pues ¿qué debería hacer Israel, dejar pasar este ataque de Hamas sin respuesta, lo que le animaría a seguir atacando? ¿Y qué del derecho de Israel a defenderse?” Ese es otro argumento que dan Israel y sus partidarios.

La verdad es que Israel, como Sudáfrica con el apartheid antes de Israel, es un estado ilegítimo —y como tal, no tiene ningún derecho legítimo de “defenderse”— y su supuesta “defensa propia” ha abarcado repetidamente la matanza deliberada de civiles, entre ellos grandes cantidades de niños.

¿Qué debería hacer Israel? Israel “debería” dejar de oprimir brutalmente al pueblo palestino. Pero Israel, siendo un estado racista, supremacista-judío (sionista), no puede hacer eso: no puede porque la opresión asesina del pueblo palestino se ha integrado en el estado de Israel desde su fundación, e Israel no podría existir sin oprimir brutalmente al pueblo palestino.

Y, ya que Israel no puede dejar de oprimir brutalmente al pueblo palestino, Israel —como un estado sionista racista— tiene que dejar de existir.

La verdadera pregunta es ¿cuál es la forma legítima para luchar contra el Estado de Israel y cuál es una solución justa a todo esto?

La respuesta definitivamente no es “matar a todos los judíos en Israel” o “empujarlos al mar”.

La respuesta es abolir el estado de Israel, y en su lugar crear un Estado revolucionario en que el gobierno y las leyes no promuevan ninguna religión y no favorezcan a ningún pueblo más que otro, sino en que haya igualdad entre judíos y palestinos.

La respuesta definitivamente tampoco es la “solución de dos Estados” promovida por la administración Biden.

Semejante “solución de dos Estados” en realidad equivaldría a nada menos que un poderoso Estado de Israel que continuaría ocupando las tierras robadas al pueblo palestino, mientras el supuesto “Estado palestino” creado mediante esta “solución” sería una burla amarga, un estado títere — meramente un mosaico de minúsculos territorios separados, cercados y dominados por Israel, en que el pueblo palestino todavía estaría sometido a una terrible opresión y privaciones. 

La respuesta es que hace falta librar la lucha contra el estado de Israel sobre una base revolucionaria, con el objetivo de poner fin a toda relación opresiva y toda desigualdad entre las personas que se base en la raza y la nacionalidad, el sexo y el género, y toda relación en la que una parte de la sociedad explote a otras.

Y lo que se necesita con urgencia es que surja una fuerza revolucionaria para dirigir la lucha sobre esa base.

Próximamente, seguiré abordando el genocidio israelí contra el pueblo palestino, y especialmente el papel de Estados Unidos en todo esto — y cómo esta situación realza agudamente la necesidad de una revolución para derrocar y abolir este sistema por completo.

De ahí voy a tratar directamente cómo podríamos hacer esta revolución concretamente — justo en el país imperialista más poderoso, Estados Unidos— justo en este tiempo. @BobAvakianOfficial