BOB AVAKIAN REVOLUCIÓN #138 Las acusaciones de “antisemitismo” —el nuevo macartismo— un vil arma del régimen fascista de Trump.

24 de septiembre de 2025

El siguiente mensaje es de Bob Avakian Oficial en Substack, y la traducción del inglés al español hecha por revcom.us. Escuche en inglés y lea en español los mensajes mediáticos de @BobAvakianOfficial

Les habla Bob Avakian —REVOLUCIÓN— número 138.

Como veterano del Movimiento Pro Libertad de Expresión en la Universidad de California-Berkeley en 1964, me indigna en particular —y toda persona decente debería indignarse— el hecho de que la actual administración de la Universidad de California (UC) haya entregado 160 nombres de estudiantes, docentes y personal al régimen fascista de Trump, en consonancia con las falsas acusaciones de “antisemitismo” de parte de dicho régimen, por ser un ataque a la libertad de expresión y la libertad académica. Esta arma del “antisemitismo” se está utilizando en la inmensa mayoría de los casos no contra los que practican concretamente el antisemitismo (ataques a los judíos por ser judíos o al pueblo judío como pueblo), sino contra los que están denunciando y protestando contra el genocidio que Israel está llevando a cabo contra el pueblo palestino, con el apoyo total de Estados Unidos.

Se trata de un ataque a todo lo que una universidad supuestamente defiende y representa — ¡un ataque con el que la administración de la UC colabora abierta y voluntariamente! Esta administración de la UC está tomando medidas para convertir una universidad famosa por su libertad de expresión en una universidad con triste fama por suprimir la libertad de expresión — en un modelo del macartismo (las cacerías de brujas en la década de 1950, encabezadas por el senador Joe McCarthy, que persiguió despiadadamente a individuos acusados de ser “enemigos comunistas”). Y, por terribles que sean las acciones de la administración de la UC, esto no se limita a la UC de Berkeley, sino que está ocurriendo en las universidades por todo Estados Unidos. Todo ello al servicio de la cruzada del régimen fascista de Trump contra los que declara sus “enemigos” — y en particular al servicio de su determinación de convertir a las universidades en cómplices e instrumentos del régimen fascista de Trump, pervirtiendo y suprimiendo la investigación intelectual y el pensamiento crítico.

No basta con decir que esta administración de la UC debería estar avergonzada. Estudiantes, profesorado, personal —todos los que se preocupan por la libertad académica y la libertad de expresión, los que se preocupan por los derechos básicos— deberían ponerse de pie juntos para exigir que esta administración de la UC repudie y revierta su cooperación con el régimen fascista de Trump. De nuevo, no se trata tan sólo de la UC-Berkeley — y no se trata tan sólo de los fascistas republicanos. A pesar de sus diferencias muy reales, y en muchos sentidos muy agudas, con los republicanos fascistas, los demócratas se han sumado con demasiada frecuencia a las falsas acusaciones de “antisemitismo”, para suprimir la libertad de expresión e incluso la enseñanza de la verdadera historia de la limpieza étnica del pueblo palestino por parte del estado sionista de Israel, desde su fundación, que ahora ha alcanzado terribles dimensiones genocidas.

En todas partes, tanto en las universidades como en otros lugares, hace falta repudiar rotundamente y oponerse activamente a esta falsa definición de “antisemitismo”, y su uso para suprimir la libertad de expresión y la actividad política. En instituciones de todo tipo, por todo Estados Unidos, la gente debe ponerse de pie en masivo desafío y exigir el incumplimiento de parte de estas instituciones con el régimen fascista de Trump.

Hace falta hacer esto con urgencia — y hay que hacerlo como parte de adoptar y actuar en consecuencia con el Llamamiento iniciado por RefuseFascism.org (Rechazar el Fascismo) y abierto a todos:

“Ha llegado la hora de… LA CAÍDA del RÉGIMEN FASCISTA DE TRUMP, A partir del miércoles 5 de noviembre de 2025, Washington, D.C…. A partir del 5 de noviembre, el aniversario del triunfo electoral de Trump, inundemos a Washington, D.C. con protestas no violentas. Rodeemos la Casa Blanca. Rodeemos el Capitolio. Rodeemos la ilegítima Corte Suprema llena de fascistas. Regresemos una y otra vez. Por todo el país, neguémonos a obedecer. Todas las personas de conciencia, millones de nosotros juntos, paremos en seco la máquina del régimen fascista.

“No nos detengamos hasta que Trump sea sacado”.