Editorial

A primera vista parece que este tercer número de Demarcaciones abarca dos conjuntos de cuestiones diferentes: uno es la lucha que se agudiza en las filas de aquellos que se consideran comunistas y revolucionarios en el mundo, y el otro surge de la experiencia contemporánea, como los levantamientos de la Primavera árabe, en donde unos pocos identifican la conexión con el más amplio movimiento comunista, en el sentido histórico o internacional.

Sin embargo en ambas subyace, con sus aparentes complejidades, una pregunta sencilla: ¿Cuál es la solución a toda esta locura y horror en el mundo hoy? ¿Hay una solución?

Sí. La nueva síntesis del comunismo de Bob Avakian proporciona una repuesta científica y muy concreta, además de un enfoque a esta cuestión.

La nueva síntesis del comunismo de Avakian representa y forja otro camino, rompe con la dinámica mortal en donde las únicas opciones, para los miles de millones por todo el mundo, son el fundamentalismo islámico o “la democracia al estilo estadounidense”, todo dentro del marco de este sistema capitalista imperialista global. Como él lo plantea en su declaración, “Egipto 2011: Millones se han levantado heroicamente… El futuro está por escribirse”, lo que se necesita y lo que es posible es: “liberarse de las fuerzas anticuadas que esclavizarían a la mujer y al pueblo en general en las tinieblas medievales y en la opresión —además de las fuerzas anticuadas que esclavizarían al pueblo en nombre de la ‘democracia’, ‘libertad’ y explotación capitalista imperialista vendidas como ‘progreso’”.

La nueva síntesis del comunismo, una alternativa real y liberadora al capitalismo-imperialismo y a la democracia burguesa, resalta claramente en este momento histórico. Se ha hecho realmente necesaria desde la restauración del capitalismo en China en 1976, luego de la muerte de Mao. Desde entonces, y con mayor intensidad tras la desintegración de la Unión Soviética revisionista en los años 90 (el capitalismo se restauró a mediados de los años 50), los imperialistas y la burguesía mundial han trabajado sistemáticamente y hasta tiempo extra para calumniar esas sociedades y experiencias socialistas iniciales como “desastres”, propagando información falsa y puras mentiras. Desafortunadamente esto se ha convertido en sabiduría popular para muchos en los sectores de intelectuales, progresistas y otros que deberían conocer mejor.

En este contexto queremos llamar la atención y recomendar altamente la reciente entrevista de Raymond Lotta en el periódico Revolución (http://www.revcom.us/a/323/no-sabes-lo-que-crees-que-sabes-es.html) en donde él muestra cómo esas sociedades socialistas, la Unión Soviética y China, contrario a la sabiduría popular, fueron increíblemente emancipadoras y liberadoras aunque también las caracterizaron errores y limitaciones en la metodología y la concepción.

Con la derrota del socialismo en China, toda la primera etapa de revoluciones comunistas llegó a su fin, y la pregunta que objetivamente se plantes es esta: ¿La revolución comunista es necesaria, deseable y viable en el mundo de hoy, si es así, entonces cuál es el marco para una nueva etapa de la revolución comunista?

Durante las últimas tres décadas Bob Avakian ha estado trabajando en este problema. Por el trabajo que Avakian ha hecho durante varias décadas, sintetizando tanto la experiencia negativa como la positiva de la revolución comunista hasta el momento y basándose en una amplia gama de la experiencia humana, se ha forjado una nueva síntesis del comunismo. En verdad hay una visión y una estrategia viables para una sociedad radicalmente nueva y un mundo mucho mejor, y existe el liderato fundamental que se necesita para llevar a cabo la lucha hacia esa meta.

No es sorprendente que la nueva síntesis haya demostrado ser una cuestión que genera debate, inclusive entre aquellos que se consideran comunistas. Un número creciente de partidos políticos, organizaciones y activistas (tanto del anterior movimiento comunista y maoísta como aquellos que han salido de batallas recientes) han estado adentrándose en la nueva síntesis y algunos han concluido que la obra de Avakian, el método y el enfoque ciertamente trazan un futuro emancipador sobre una base más científica, proporcionando una base real para superar la crisis en el movimiento comunista, atrayendo a nuevos luchadores revolucionarios y desencadenando una nueva etapa de la revolución comunista.

Sin embargo otros están azotando furiosamente a la nueva síntesis, ya sea porque han rechazo el comunismo en su totalidad o porque han adoptado una visión religiosa del comunismo en vez de un enfoque crítico y científico hacia éste. Estos constituyen “reflejos contrarios” en oposición a la nueva síntesis: por una parte, los que regresan por inspiración a los ideales democráticos del siglo XVIII, renunciando a la revolución comunista completamente en una base absolutamente superficial, acrítica y sin rigurosidad científica —y por otra, aquellos que rechazan tanto la base como la necesidad para desarrollar mucho más la teoría comunista, tratándola esencialmente como un conjunto de preceptos religiosos adoptando una interpretación selectiva de la experiencia revolucionaria y la teoría comunista del pasado, a veces refractada en un prisma de nacionalismo y democracia burguesa. Ambos reflejos contrarios incluyendo a aquellos que afirman ser “comunistas” y “maoístas”, adoptando el apodo pero modificando y socavando el contenido.

Una base fundamental para cualquiera que busque entender y cambiar el mundo —y para un marco global, la textura y el contenido en estos temas, recomendamos El comunismo: el comienzo de una nueva etapa, un Manifiesto del Partido Comunista Revolucionario, Estados Unidos [Disponible en español en: revcom.us/Manifesto/Manifesto-es.html] y los artículos de esta revista en esta y anteriores ediciones. Demarcaciones continúa su misión de comprometerse a polemizar la nueva síntesis con esos “reflejos contrarios”.

Subyacente a este compromiso de polemizar hay un conjunto de preguntas en extremo relevantes y urgentes para aquellos que buscan cambiar el mundo: ¿Cuál es la dinámica que explica cómo opera el mundo? ¿Cuál es el método y el enfoque para entender la realidad y transformarla? ¿Cuál es el problema, la causa de esta opresión y explotación y del innecesario sufrimiento en el mundo hoy —cuál es la solución a todo esto? ¿Qué es el comunismo y qué es una revolución verdadera que conduzca a la emancipación? ¿Cómo entendemos las experiencias pasadas de la revolución y su transformación radical de la sociedad, especialmente en la Unión Soviética y en China? ¿Cuál es el camino a seguir para emancipar la humanidad, y el marco para una nueva etapa de la revolución comunista hoy?

Estas son cuestiones decisivas e histórico-mundiales de esta coyuntura, decisivas para aquellos que buscan la liberación y la emancipación, una salida a esta locura y horror —en el Medio Oriente, en Brasil, en Estados Unidos, en India y en todos los países del mundo. Este es un llamado hacia la necesidad de discutir colectivamente y luchar con ellos porque hay una respuesta, un enfoque y una salida, concentrados en la nueva síntesis del comunismo de Avakian. —1º de enero de 2014.

Unas palabras sobre los documentos de los debates en el Movimiento Comunista Internacional

Un debate que se ha venido gestando desde hace tiempo en las filas de los comunistas que comparten una historia común como parte del movimiento maoísta mundial ha estallado completa y abiertamente.

El debate se da principalmente sobre si la revolución comunista es viable y deseable en el mundo de hoy, y qué constituye el marco para una nueva etapa de la revolución comunista, con la nueva síntesis del comunismo de Bob Avakian como la referencia central y punto focal en este debate.

Varios de los artículos de este número aparecieron inicialmente como documentos de esta significativa lucha de dos líneas, un término acuñado por Mao Tsetung para describir el conflicto periódico e intenso entre dos posiciones políticas e ideológicas y enfoques metodológicos diametralmente opuestos, que en últimas hacen una demarcación entre el camino de la revolución, de cambiar el mundo radicalmente, y el del revisionismo, dejar el mundo tal y como es. Estas polémicas son parte de una discusión que empezó entre los partidos y las organizaciones que conformaban el Movimiento Revolucionario Internacionalista (MRI). Estamos publicando los artículos aportados en un paquete por su coherencia y sus temas en común. Con esto buscamos desarrollar la misión de Demarcaciones mencionada arriba, el compromiso a polemizar con los “reflejos en el espejo” y ayudar a forjar y hacer avanzar a los comunistas en el mundo hoy, una necesidad urgente. Algunos de estos artículos ya han aparecido públicamente en varios idiomas.