BOB AVAKIAN REVOLUCIÓN #124: Todo el régimen fascista de Donald Trump está envuelto en una contradicción de su propia creación: las continuas Grandes Mentiras de Trump.

22 de junio de 2025

El siguiente mensaje es de Bob Avakian Oficial en Substack, y la traducción del inglés al español hecha por revcom.us. Escuche en inglés y lea en español los mensajes mediáticos de @BobAvakianOfficial

Les habla Bob Avakian —REVOLUCIÓN— número 124.

¡Que se largue el régimen fascista de TrumpYa!

¡Basta de esperar elecciones que se celebrarán muy, muy tarde — si es que llegan a celebrarse! ¡Basta de hablar de “otros tres años y medio” de este régimen fascista! Hablar así equivale a acomodarse con este fascismo… acomodarse significa colaborar con su monstruosa y creciente tiranía y sus continuas atrocidades.

Desde su regreso al poder, en enero de este año (2025), Trump ha violado repetidamente la Constitución y el debido proceso legal, pisoteando despiadadamente lo que se supone son los derechos básicos de las personas, ya sean inmigrantes sin documentos, residentes legales o ciudadanos.

Un ejemplo concentrado de esto han sido las redadas contra los inmigrantes por parte del régimen de Trump, y sus medidas para deportarlos velozmente —lo que incluye a una prisión-cámara de tortura en El Salvador— sin una audiencia ni siquiera la oportunidad de hablar con un abogado. Estas redadas tipo Gestapo las han llevado a cabo hampones fuertemente armados y enmascarados que se arrogan la autoridad de la ley — mientras violan sistemáticamente la ley y el debido proceso. En ocasiones, estas “redadas” hamponescas de hecho han afectado a ciudadanos estadounidenses —y Trump ha amenazado con deportar a ciudadanos estadounidenses a prisiones como la de El Salvador— otra flagrante violación de la Constitución.

Todo esto “se justifica” con la afirmación de que “Trump fue elegido para hacerlo”. Ante todo, repitamos la siguiente verdad crucial: independientemente de la forma de llegar al poder —ya sea mediante elecciones o no—, el fascismo siempre es ilegítimo. Y lo que en realidad ocurrió, en cuanto a las elecciones de 2024, es que lo que estaba al frente de la campaña de Trump fue repetir las mentiras racistas de su primera campaña presidencial (2016) —calumniando a millones de inmigrantes como criminales, violadores y asesinos—, cuando la inmensa mayoría de los inmigrantes, con o sin documentos, son simplemente personas comunes que buscan una vida mejor para sí y sus familias, y que hacen importantes aportes a la sociedad.

Así que, dado que la realidad es que no existen hordas de criminales inmigrantes monstruosos, a fin de llevar a cabo su perversa “promesa” de campaña de perseguir y deportar masivamente a los inmigrantes, ¡los golpeadores de Trump están persiguiendo a los inmigrantes, entre ellos a los niños, en su día a día —en el trabajo, la escuela, una tienda, una iglesia, en sus hogares— o cuando se presentan a sus audiencias de estatus migratorio programadas regularmente!

Se demuestra que son falsas las afirmaciones de parte de los nazis dementes, como Stephen Miller, que conforman este régimen —de que “para esto eligieron a Trump”—, ya que los golpeadores del régimen arrestan en redadas y aterrorizan repetidamente a los inmigrantes que, en su inmensa mayoría, no son delincuentes violentos peligrosos. No olvidemos que, durante su primer régimen, Trump desgarró a familias de inmigrantes, arrebatando a grandes números de hijos a sus madres y padres. Y ahora, como parte de aterrorizar deliberadamente, los objetivos de este régimen incluyen a las “familias mixtas” (algunos miembros con ciudadanía y otros sin ella, y posiblemente sin documentos), mientras que funcionarios como el esbirro fascista “zar fronterizo” Tom Homan declaran cínicamente que, para evitar la separación de las familias inmigrantes “mixtas”, los miembros de la familia con ciudadanía pueden “autodeportarse” junto con los familiares sin documentos que están sometidos a la deportación forzosa — ¡y, en muchísimos casos, ilegalmente!

Este tipo de crueldad es una parte deliberada de la orientación fascista general de este régimen. Y todo esto cuenta con el respaldo de la movilización de las fuerzas armadas para amenazar y suprimir por la fuerza a los individuos quienes protestan de manera justa contra este atropello.

Los golpeadores enmascarados fascistas de Trump han ido al extremo de agredir y arrestar a políticos del Partido Demócrata — en un esfuerzo por dejar impotente a la oposición, incluso dentro de las filas de la clase dominante, y más allá de eso, para intimidar a cualquiera que se oponga a este régimen fascista de Trump.

Estos ataques terroristas contra los inmigrantes, y contra los individuos que se solidarizan con ellos, son parte de las acciones generales de este régimen fascista para imponer a la fuerza un retorno a una situación del tipo que existió en Estados Unidos durante la mayor parte de su existencia — en que se proclaman abiertamente la opresión racista y la opresión por motivos de sexo y género, y la lealtad burda y descerebrada a la supremacía estadounidense, y ahora un régimen repleto de fanáticos anticientíficos desquiciados la está imponiendo, mientras que aquellos que se le oponen son objeto de ataques violentos. Este régimen fascista de Trump está decidido a avanzar a toda velocidad para imponer todo esto con una tiranía estatal policial cada vez más intensa.

Las Grandes Mentiras sobre los inmigrantes, y las acciones brutales sin ley que se llevan a cabo a partir de estas Grandes Mentiras, constituyen un ataque frontal y un ariete en la campaña de este régimen para consolidar su dominio fascista. Al mismo tiempo, sus acciones basadas en estas Grandes Mentiras —de perseguir despiadadamente a los inmigrantes que no son criminales violentos— le están causando grandes problemas al régimen de Trump: masas de gente común, entre ellas grandes números de personas que no son inmigrantes pero que sí creen en los derechos básicos y en tratar a las personas de forma justa y decente, se han indignado por estos ataques contra los inmigrantes y se han movilizado en protesta — como parte de las enormes protestas y resistencia continuas en general contra los atropellos multifacéticos los que perpetran a continuo este régimen fascista y su tiranía sin ley en curso.

Ya basta — de hecho, las cosas ya han ido a los extremos, y sin derrotar a este fascismo y sin sacarlo pronto, en realidad será muy tarde.

Ya nos está encima el momento: hace falta ya un gran aumento cualitativo de la resistencia implacable contra este régimen fascista, volviéndose aún más masiva y sostenida —que movilice a muchos millones de personas— con acciones no violentas pero con una férrea determinación en torno a la crucial exigencia unificadora de que ¡se larguen Trump y su régimen fascistaYA!: con el objetivo de nada menos que parar en seco el funcionamiento de este régimen fascista y crear las condiciones para que sea sacado del poder.